El debate de los vientres de alquiler que ha saltado a la opinión pública en los últimos meses es, a la vez, simple y complejo. Es complejo porque no es unidireccional, sino que se puede abordar desde muchos diferentes aspectos: la ética, el feminismo, el neoliberalismo, la pobreza, las relaciones norte-sur, el consumismo, los derechos humanos, el aborto etc. es complicado explicar todos los matices a los que afectan los vientres de alquiler, pero al mismo tiempo es simple posicionarse en contra de esta práctica pues en definitiva, todo se reduce a una cuestión de poder y explotación sobre las mujeres más pobres y más vulnerables. Vamos a intentar, en este artículo, acercarnos a los vientres de alquiler desde diferentes ángulos sabiendo que, aun así, dejamos muchas cuestiones fuera.