Presentación del libro «Al menos flores, al menos cantos» en Este o Este, el día 18 de abril de 2012.
http://www.youtube.com/watch?v=ZR_ZJ0cKy7o
http://www.youtube.com/my_videos_edit?ns=1&video_id=X29uhV1bdik
Presentación del libro «Al menos flores, al menos cantos» en Este o Este, el día 18 de abril de 2012.
http://www.youtube.com/watch?v=ZR_ZJ0cKy7o
http://www.youtube.com/my_videos_edit?ns=1&video_id=X29uhV1bdik
Aquí os dejo otro poema de «Al menos flores, al menos cantos»
Domingo
Los domingos se abren reducidos a polvo,
la ciudad queda atrás convertida en tormenta,
el cuerpo se acomoda al paso misterioso de las horas.
En domingo, mi cuerpo y la ciudad respiran al unísono.
¡No aguanto más la lactancia!. Ha sido una pesadilla, así que ahí va un poema para desintoxicarme.
Poco a poco voy publicando poemas de mi nuevo libro, que publicaré en breve. Además, ante la desesperanza que nos rodea (¿o sólo soy yo?): más poesía.
Agosto es un buen mes para escribir poesía porque nadie lee nada, así que aquí va un poema para un mes más bien vacío
Obligatorio ser feliz
Estas son dos de las poesías que leí en el recital ofrecido el día 28 en Berkana y que pertenecen a lo que será mi nuevo libro de poesía: «Al menos flores, al menos cantos».
Inmóvil para que no me duela, detenida,
Poesía: La luz que más me llama
Del Poemario La luz que más me llama, Olifante, Ediciones de poesía, 2009, Zaragoza
Como todos vosotros he soñado marcharme
y me he visto caminando muchas veces.
Como todos vosotros, me he parado y he vuelto,
al fin y al cabo, siempre encuentro el camino de regreso.
A mi favor contad que mil veces he emprendido el camino
que ya es más de lo que todos vosotros habéis hecho.
En mi contra, ya sabéis, el miedo me ha podido
y he dejado, cobarde, que transcurriera el tiempo,
y he rehecho mis pasos cada vez que he partido.
Y aquí estoy.
Y ahora por fin, cuando el tiempo ha matado el tormento,
partir puede no ser siquiera necesario.
Dónde voy a marcharme, dónde voy a ocultarme,
si vaya donde vaya me llevaré conmigo.
Si es que hoy vas a venir hasta mi casa
Si es que hoy vas a venir hasta mi casa
como has dicho que harías esta tarde,
hazlo ahora, hazlo pronto
porque ya, en un minuto, he de cambiar de casa.
Si te retrasas, para cuando al fin vengas,
de mí, aquí, ya no habrá nada
ni nadie que recuerde mi nombre, ni mi aroma.
Yo no te he de buscar allí donde me mude,
viviré solitaria lo que quede
y, por encima de cualquier otro amor,
recordaré tu olor, recordaré tu nombre.
Revista Trasversales número 15, verano 2009