El sábado es la jornada de reflexión y ¿qué mejor manera de reflexionar que venirte al Café Libertad a escuchar poesía?
Decir que No
Brindo por el día en que aprendí a decir No.
Brindo por el día en que me negué a todo,
en el que esculpí la conciencia como si fuera roca
y en el que tallé la rabia sobre la noche maga.
Brindo por el día en que vomité la ira sobre los otros, fuera,
sobre la arena tibia o los bosques morados,
incluso sobre la vida inesperada
que aun puedo encontrar al doblar un recodo.
A todo eso aprendí a decir No.
Y ahora, si digo No
tendré que temer el beso que me aplaca
porque también al beso tierno hay que negarse.
Desde ese día mi boca dice No a todo,
incluso a las dulces melodías de mañana,
y a la alegría, especialmente a la alegría.
Aprendí a decir No porque conozco el alba
y conozco también el cielo rojo de la tarde,
porque puedo caminar entre las ruinas
pronunciando palabras que la gente no escucha
y aun así no puedo dejar de pronunciarlas.
Si amaneció ese día en que dije No
y después no tuve miedo a la venganza
es porque he aprendido a estar completamente sola,
en la derrota, sí, y en la victoria,
porque ahora soy capaz de negarme a todo
y de abrazarlo todo al mismo tiempo.
Brindemos pues por todo lo negado.
Brindemos entonces por todo lo vivido.
2 respuestas a «Jornada de reflexión escuchando poesía»
Pues sí, aunque nos separen km brindemos por todo ello.
hermoso realmente