Perdón por el título de este post, por lo obvio y lo fácil, perdón. Pero me está ocurriendo una cosa muy curiosa en estos días y es que cada vez que veo a Esperanza Aguirre sonrío. Que yo sonría viendo a la presidenta de mi comunidad era hasta ahora algo impensable…hasta que llegó Mr. Adelson (cuya cara de por sí es para sonreír) y a la presidenta se le puso cara de Pepe Isbert, y no me digan que no es gracioso. Al principio daba un poco de vergüenza todo el asunto, pero en cuanto se desinhibe una y, sobre todo, en cuanto se recuerda a Manolo Morán y a Pepe Isbert en ‘Bienvenido Mr. Marshall’, se acabaron las penas. Porque sí, somos pobres, pero a reírnos de nosotros mismos no nos gana nadie. Al principio dolía un poco darse cuanta de que aquella España que refleja el film de Berlanga, aquella España pobre, cutre, inculta y humillada, era algo que habíamos superado. Pero enseguida aparece la sonrisa y se van las penas. Esa España ha vuelto y se acabó el alicatado hasta el techo, el AVE a mil por hora, los auditorios de Moneo en un pueblo de 500 habitantes o los aeropuertos para que paseen los viandantes.¡Ala, Adelson nos ha devuelto a la realidad!
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4 respuestas a «Bienvenido Mr. Adelson»
Mafioso!!!
Que mas quisieramos hoy tener a Las Vegas a media hora se Madrid com o sin horteras, pero generando empleos y divisas a tutiplen…
Adelson no es un empresario, recomiendo leer si biografía en la versión anglofona de wikipedia, practicas antisindicales, apoyo al neofascista Likud, evasión de impuestos, tratos con la mafia de Macao…Resumiendo coon una sola palabra: Putiferio.
Como ciudadana de Barcelona el tema del Eurovegas me duele especialmente. La prensa local ya da por hecho que lo que quiera que sea eso del Eurovegas se va a instalar aquí. Me duele ver cómo nuestros políticos son capaces de cualquier cosa por quedar bien con el tal Sr. Adelson, me duele cómo se puede ir al garete el Parc Agrari del Prat y cómo se pueden pasar por el forro la legislación sobre tabaco o las leyes laborales solo con que chasquee los dedos.