Seguimos sin ser un país normal y nuestra derecha es una derecha antidemocrática y con veleidades fascistas por mucho que se vistan de liberales. Su defensa cerrada, incluso en los tribunales, del franquismo no es discutible. Han defendido el franquismo de todas las formas posibles. No hay una sola condena del franquismo por parte de nadie del PP y, sobre todo, han dificultado por todos los medios a su alcance cualquier paso dado para condenar o reparar aquel régimen. No sólo se han negado a condenarlo en todas las instancias en las que se han visto requeridos para hacerlo, sino que han puesto todos los impedimentos posibles para que otros partidos lo condenaran y han tratado por todos los medios también de dificultar el resarcimiento debido a los que entonces defendieron la democracia frente a la dictadura; han tratado de impedir que la gente pudiera sacar a sus familiares asesinados de las cunetas, se han burlado de ellos y han intentado también por todos los medios posibles falsear la historia.
Finalmente se han negado a retirar los símbolos de una dictadura hasta hoy mismo, casi 80 años después. Y esto lo están haciendo no sólo de palabra, no sólo con manifestaciones que podrían ser más o menos extemporáneas y fruto de su manera antidemocrática de ver el mundo. No, no están opinando, están dedicados a ello tratando incluso de utilizar las leyes para perseguir a quienes, a su vez, utilizan las leyes, en esta caso la de Memoria Histórica, para cumplir con lo que aunque no hubiera ley, sería una cuestión de sentido común, de decencia política y, como poco, de espíritu democrático. Ahora, Esperanza Aguirre pretende demandar a la alcaldesa de Madrid por cumplir la ley y, en todo caso, por retirar símbolos franquistas de la ciudad.
Y mientras defienden los vestigios del franquismo como si les fuera la vida en ello, el Partido Popular se deshace podrido por dentro. Seguramente añoran aquellos tiempos en los que todo era suyo y podían robar sin miedo a que algún juez investigara. Casi ocho décadas después de la instauración de una dictadura que se levantó contra una democracia, el Partido Popular se aferra a la defensa de aquel régimen de 1939 seguramente para distraer del hecho de que su régimen de ahora, el régimen del expolio, la corrupción y el saqueo, se está derrumbando y amenaza con llevárselos por delante.
El hecho de que tengan que disolver el partido en Valencia porque no hay un solo concejal ni concejala que no esté pringado da idea de a que límites se ha llegado en esta partido que defiende el franquismo con la misma convicción que cobra mordidas, sobresueldos y comisiones. Ahora creen que bastará con cambiarse el nombre para poder seguir haciendo lo mismo. Nadie les puede acusar de incoherentes. Son partidarios de una dictadura que se niegan por activa y por pasiva a condenar y muchos de sus cargos se siguen comportando como si estuviesen en una. 80 años después ya sería hora de que se les dejara claro que este país no es suyo; que se vayan.
Publicado en: Público
3 respuestas a «Un partido corrupto y franquista»
Evidentemente el PP tiene un serio problema con la corrupción, cuyo origen esta en la pésima legislación relativa a la financiación de partidos políticos de la Transición. No parece no obstante que sus escandalos sean más graves que el PSOE andaluz (también, presuntamente, intimamente ligado a la financiación irregular del partido que propicia que el intermediario del partido saque su particular mordida) ni desde luego similar al colosal fraude político, legal y moral de Jordi Pujol mientras los mass media nos aseguraban que todo era una conspiración centralista contra el Molt Honorable. Reconociendo por tanto la corrupción del PP no deja de causar asombro que se acuse a este partido neoliberal de franquismo. El franquismo no fue más que un régimen autoritario y corporativo basado en el integrismo católico algo muy distinto desde luego de los verdaderos modelos del PP actual (Von Hayek, Margaret Thatcher, Milton Friedman…).
El PP nunca ha homanajeado a criminales de guerra de la Guerra Civil, la izquierda si lo ha hecho : El héroe progresista Marcos Ana: ¿un asesino sin arrepentir? http://blogs.periodistadigital.com/bokabulario.php/2010/02/16/marcos-ana-donde-hay-un-comunista-hay-sa#.VreXkBPeiKo.twitter
Nada me irrita más que 40 despues de Franco sigamos discutiendo de calles, aqui hay un fragmento muy intersante : «La dictadura franquista alteró los callejeros de todos los municipios españoles para encajar en ellos a sus héroes, desde las Plazas del Generalísimo a las Avenidas de José Antonio. Y a partir de 1979, fecha de las primeras elecciones municipales desde 1931, los nuevos gestores de muchos ayuntamientos dieron la vuelta a la tortilla. En vez del general Mola, el terrorista Pablo Iglesias o el golpista Companys o el islamista Blas Infante o el racista inculto Sabino Arana o el sanador de homosexuales Salvador Allende.» http://www.libertaddigital.com/opinion/pedro-fernandez-barbadillo/tierno-galvan-el-ultimo-alcalde-franquista-de-madrid-76158/